Descubre Nuestra Historia
El Legado de Ecocordero
Con una dedicación que supera el siglo, nuestra explotación agraria familiar es mucho más que una empresa: es sinónimo de tradición, esfuerzo y pasión transmitidos de generación en generación.
La Historia
Raices Profundas Legado Firme
Con más de un siglo de trayectoria, la explotación agraria familiar no solo representa una empresa familiar, sino el testimonio vivo de una herencia familiar basada en el trabajo, la tierra y la pasión por el campo. Nuestra historia comenzó allá por el año 1880, cuando María José, con coraje y una visión adelantada a su tiempo, fundó los pilares de lo que hoy continúa creciendo con orgullo en su tercera generación.
Desde sus humildes comienzos, el compromiso fue claro: brindar calidad, responsabilidad y respeto por la naturaleza y los animales. Ese espíritu, transmitido de padres a hijos, ha perdurado hasta hoy, manteniéndose firme en cada decisión, en cada cosecha y en cada cría.


Lo que nos mueve
Producción responsable, trabajo con sentido
Nuestra actividad principal es la cría y venta de corderos, un proceso que cuidamos desde el origen, asegurando bienestar animal, alimentación natural y manejo responsable. Criamos corderos sanos, con genética seleccionada y en condiciones óptimas, que garantizan carne de excelente calidad.
Complementamos nuestra labor con la producción y venta de alfalfa y cereales varios, generados en nuestras propias tierras. Nos aseguramos de que cada cultivo reciba el tratamiento adecuado para ofrecer forrajes y granos nutritivos, tanto para consumo animal como comercialización.
Filosofía
Honestidad, respeto y amor por el campo
Trabajamos con una premisa simple y poderosa: hacer las cosas bien, como nos enseñaron nuestros abuelos. Valoramos el contacto directo con el campo, el trato justo con nuestros clientes y el respeto absoluto por el entorno.
Creemos que la tradición no está reñida con la innovación, por eso combinamos prácticas ancestrales con herramientas modernas que nos permiten mejorar nuestros procesos y cuidar aún más cada detalle.